La conciencia cultural es necesaria para el futuro, puesto que es una forma de cultivar el valor del respeto, que durante mucho tiempo se ha pasado por alto ocasionando problemas como la pobreza extrema versus enriquecimiento desmedido, el calentamiento global, la exterminación de etnias, la persecución religiosa y política, etc. Frente a esto ¿qué podemos hacer?
La educación cultural involucra el reconocimiento de aspectos folclóricos presentes en nuestra cultura para así poder valorarlos y conservarlos, fortaleciendo de esta forma la identidad de una comunidad, entendiendo esta como al conjunto de aspectos comunes que reúnen a un grupo de personas en un área geográfica. Es así como, la cultura y la educación son una fortaleza que tienen todas las personas puesto que el énfasis en su desarrollo desde pequeños favorece la autoestima y es necesaria para la mantención del medio social. Se transforma entonces, en una herramienta eficiente para disminuir vicios sociales como la delincuencia, la drogadicción, la cesantía, etc. sobre todo en estratos sociales más bajos. Al reforzar valores propios y fortalezas ligadas a oficios, comidas, fiestas, reuniones deportivas, etc. que se desvalorizan con la globalización y la falta de oportunidades, se refuerza la identidad de la comunidad y por ende el trabajo en equipo que puede lograr el alcance de objetivos en beneficio de ellos mismos.
La educación cultural involucra el reconocimiento de aspectos folclóricos presentes en nuestra cultura para así poder valorarlos y conservarlos, fortaleciendo de esta forma la identidad de una comunidad, entendiendo esta como al conjunto de aspectos comunes que reúnen a un grupo de personas en un área geográfica. Es así como, la cultura y la educación son una fortaleza que tienen todas las personas puesto que el énfasis en su desarrollo desde pequeños favorece la autoestima y es necesaria para la mantención del medio social. Se transforma entonces, en una herramienta eficiente para disminuir vicios sociales como la delincuencia, la drogadicción, la cesantía, etc. sobre todo en estratos sociales más bajos. Al reforzar valores propios y fortalezas ligadas a oficios, comidas, fiestas, reuniones deportivas, etc. que se desvalorizan con la globalización y la falta de oportunidades, se refuerza la identidad de la comunidad y por ende el trabajo en equipo que puede lograr el alcance de objetivos en beneficio de ellos mismos.
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